Kristof Irwin de Positive Energy recientemente invitó a nuestro amigo Lucas Johnson de 475 Building Supply a su podcast para una fascinante discusión sobre la construcción sustentable.
El tema específico es el impacto del aislamiento en la huella de carbono de un edificio... algo que nos preocupa bastante . Tanto si eres un experto en construcción como si eres un propietario curioso, la apasionada perspectiva de Lucas y Kristof sobre la construcción sostenible te resultará atractiva.
Carbono operacional vs. carbono incorporado
Comienza con una explicación crucial del carbono operativo frente al carbono incorporado y por qué es tan importante distinguirlos. El carbono operativo de un edificio se refiere al ahorro energético, es decir, a la cantidad de dióxido de carbono que genera. El carbono incorporado es el dióxido de carbono emitido durante el ciclo de vida de los materiales de construcción. Fundamentalmente, el carbono operativo es teórico, ya que el consumo energético de un edificio puede fluctuar, pero el carbono incorporado es más seguro. De ninguna manera debemos minimizar el ahorro energético (carbono operativo), sino que debemos considerar el edificio de forma integral e incorporar también su huella de carbono incorporada. ¡Ciertamente, es posible tener un edificio eficiente construido de forma ineficiente!
El aislamiento importa
¿Y qué papel juega el aislamiento en esto? Como señala Lucas, los materiales aislantes tienen un impacto enorme en la huella de carbono operativa e incorporada, dada su gran cantidad. El cambio más drástico en la huella de carbono de un edificio se puede lograr simplemente cambiando el aislamiento elegido. Un buen ejemplo es el de una casa de 1500 pies cuadrados con un impacto inicial estimado de carbono de 70,000 lb al construirse con espuma en aerosol y paneles de espuma XPS. Al cambiarlo por aislamiento de madera y lana, el impacto de carbono se reduce a -30,000 lb. ¡Un aumento de 100,000 lb con solo cambiar el aislamiento! La guinda del pastel es que el aislamiento tendrá un mejor rendimiento (carbono operativo) con un aumento insignificante en el costo inicial. ¡Todos ganan!
Pensando en el futuro
Un último punto que nos gustaría añadir. Es fácil sonar moralista al promover la construcción saludable, pero Lucas y Kristof hacen un excelente trabajo al evitarlo. Su conversación expone de forma clara y lógica las razones para construir correctamente, sin juzgar cáusticamente la alternativa. De hecho, hacen referencia a experiencias pasadas con materiales "poco sostenibles". Este es un componente crucial de la conversación. Nadie tiene un historial perfecto en cuanto a la elección de materiales de construcción. (¡Esto también aplica a nuestras decisiones de consumo diarias!), pero lo que más importa es lo que hacemos ahora y en el futuro. Existen alternativas entre las que podemos elegir, ya sea reemplazar el aislamiento de espuma en aerosol por lana o evitar el agua embotellada para rellenar el termo. Tómate el tiempo para informarte y tomar mejores decisiones. Por suerte, contamos con personas como Lucas y Kristof para ayudarnos con eso. Escucha su conversación AQUÍ .